Me
siento totalmente aislada, o parte de un uno por ciento de la población
lectora, cuando empiezo a leer un libro de una escritora o escritor a los que
sigo, a los que venero por como me han hecho disfrutar con sus libros, y de
repente, me llega su última novela y me quedo helada, porque me parece imposible
que sea una obra escrita por la misma mano.
Me
siento totalmente aislada, o parte de un uno por ciento de la población
lectora, cuando los comentarios y ventas, me sorprenden tanto, dado que no comparto
ese entusiasmo.
Finalmente,
entre esos aluviones de exclamaciones positivas, encuentro un comentario con el
cual me siento identificada. Y suspiro de alivio. Entonces, tristemente, soy
consciente, de formar parte de ese uno por ciento.
Y, lógicamente,
me subyace esa duda de la que nunca me puedo desprender: ¿mis lectoras, mis
lectores, también forman parte de ese uno por ciento?